De intercambio en Madrid

Las aventuras de un SICUE gallego en la Villa y Corte

11.2.07

Las tripas de Madrid

Este fin de semana han estado aquí mi hermana Alda y su novio Alberto. Llegaron en avión el viernes y esa misma tarde salimos de tiendas y tapas. En la esquina de Augusto Figueroa con Pelayo (Metro Chueca, para el que se quiera acercar a verlo) había una rejilla metálica que ocupaba toda la calzada. Al irnos acercando vi cómo un montón de chiquillos saltaban sobre ella, chillaban y escupían. Así que, mientras los demás miraban tiendas de ropa, me acerqué a mirar. El espectáculo era realmente interesante: la rejilla, más o menos circular y de unos 4 m de diámetro, actúa como tragaluz de un pozo profundo como una casa de cinco o seis pisos, en el fondo del cual había unos obreros trabajando, me imagino que en alguna remodelación del suburbano. La sensación de atravesar la rejilla caminando directamente sobre el vacío daba bastante impresión... Pobres obreros; me imagino que los chavales de antes estarían jugando a ver si les acertaban con los escupitajos, y que no les hagan nada peor...