Cuestión aclarada

Hace un par de días leí esta penosa noticia en la página de BirdLife International; os la resumo: El Refugio de Fauna Salvaje de los Lagos de Pocosín (Carolina del Norte) está en terrenos del ejército de Estados Unidos. Allí crían varias especies poco comunes, y en invierno es visitado por decenas de miles de aves acuáticas invernantes (una especie de Villafáfila, vamos). Después de abandonar el proyecto tres veces, se plantea de nuevo el reconvertir la zona en un campo de pruebas para aviones, tras descubrir la forma de evitar que alguna de las muchas aves que allí hay cause un accidente: basta con eliminar los cultivos de cereales donde se alimentan las aves acuáticas para que se marchen de allí (para que se marchen de la reserva que se creó precisamente porque estaban allí), y las que queden siempre pueden ser tiroteadas o envenenadas... Realmente de locos; no sé en qué cabeza cabe el plantearse una solución así.

Ayer Ángel y Ana (los sobrinitos de nuestra compañera Ana de Segovia) nos enseñaron orgullosos el Prado del Esfuerzo; un campo en el que construyen sus fortines excavando agujeros y amontonando piedras. Excavando Ángel no dejaba de desenterrar escarabajos, hormigas, lombrices... Y, al decirle Mario que les estaba destrozando la casita a los bichos respondió resueltamente: “bueno, pues que se marchen, que aquí estoy trabajando yo...” Y sí, entonces me di cuenta del nivel al que se mueve el que propuso lo de Pocosín; el nivel de un niño de ocho años.

10 horas con Mario

Mario es uno de esos compañeros a los que, pese a compartir con él muchas clases desde el primer día, no he ido conociendo bien hasta pasados unos meses; y ahora me arrepiento del tiempo perdido.
Abandonados en un Madrid vacío por el puente, hemos dedicado el día de hoy a visitar diversos puntos y comunidades vegetales de la vertiente segoviana de la Sierra de Guadarrama. Comenzamos con un paseo por los pinares de Boca del Asno, después otro en los rebollares de La Pradera, y acabamos en los prados de San Cristóbal de Segovia. Allí nos esperaban Ana (la de Madrid) y Ana (la de Segovia), dos compañeras nuestras que llevan tres días capturando insectos polinizadores en la zona para la troncal del proyectito (la mía de la avutarda). La familia de Ana (la de Segovia); un padre, una madre, una hermana, dos sobrinos y un perro; nos acogió generosamente y comimos en su casa.

Naturalísticamente hablando ha sido una jornada muy agradable: he visto muchas aves de las que tenía pocas observaciones o que hacía mucho tiempo que no veía (como un precioso mirlo-acuático europeo Cinclus cinclus en Boca), levantamos un corzo Capreolus capreolus a apenas unos metros en La Pradera; y, atareada alimentándose entre unos rosales silvestres rebosantes de ruiseñores comunes Luscinia megarhynchos, pude ver mi primera curruca mosquitera Sylvia borin.

Elecciones varias

Ahora que se acerca el 27 de mayo, Madrid (como toda España) vive inmersa en un frenesí de inauguraciones, entre las que destacan las relacionadas con la infraestructura de transportes: La ampliación de un buen número de líneas de metro y los túneles de la nueva M-30. El problema viene cuando, por correr, se acaban las cosas de cualquier manera; y luego claro, se pone a llover un par de días y pasa lo que pasa... Y cómo es la gente, que enseguida afila el colmillo (yo venga, tirando de Youtube).

Y ya que hablamos de elecciones, el miércoles ganó el actual Rector, Carlos Berzosa, con un 45 % del voto ponderado; seguido de Ángel Nogales (sí, el rector de los chavales, el del concierto), con un 23 %. Ambos candidatos se enfrentarán en segunda vuelta (como en Francia) el 9 de mayo; ¡Berzosa vs. Nogales, elecciones en la huerta!

Yo soy un infeliz...

En la parroquia de Cristo Rey, a la que voy a Misa por las mañanas, tienen la costumbre de predicar una breve homilía todos los días, y no sólo el domingo. Hoy celebraba un sacerdote argentino de viaje en Madrid y, pese a mis esfuerzos por prestarle atención, cuando empezó a hablar me recordaba irresistiblemente al número de Les Luthiers de “El Sendero de Warren Sánchez” (I y II), así que bastante tuve con aguantarme la risa... Bendito sea Dios, cómo somos a veces.

Y qué grandes, Les Luthiers... Desde hace un mes tenía dos entradas para poder asistir el 15 de mayo a su espectáculo “Las obras de ayer: El refrito”, que incluía tanto el anterior como otros números míticos del quinteto argentino... y con la coña de Noruega, me lo pierdo. Bueno, pues otra vez será, ¿no?

Hihi

Empiezo a hartarme de las obras en la Facultad... Últimamente los obreros han ocupado todos los ascensores y las colas para poder usar uno son interminables. No es de extrañar así que cada vez más gente opta por el sano ejercicio físico de subir escaleras; aunque las continuas idas y venidas a la planta 9 van a acabar con mi salud más que mejorarla. Yo me engaño, pensando que son las escaleras de la cúpula de San Pedro; para cuando llego arriba ya me da igual que las vistas tengan más bien poco que ver con las de la linterna de la Basílica...

Hoy (en la planta 9, cómo no) he asistido a una charla sobre Reintroduction and conservation of an endarbered New Zealand bird: The hihi, a cargo del Dr. John Ewen. El tal John es un tío de dos metros cuadrado como un armario, así que enseguida se ganó el mote de Hihi-man, como el muñeco de Greyskull. Para desesperación mía, éste hablaba inglés con mucha mayor soltura (es decir, mucho más rápido) que la sueca del viernes pasado, y además con una mezcla de acentos imposible de seguir. Pero como cuando hay hambre no hay pan duro, y el tema era muy interesante, conseguí enterarme de lo suficiente: El hihi Notiomystis cincta es una de las muchas especies de aves endémicas de Nueva Zelanda que estuvieron a punto de extinguirse por los problemas derivados de la colonización europea. Mientras que otras especies han respondido bien a los planes de conservación, el hihi no acaba de levantar cabeza, y en la charla vimos algunos de los problemas a los que se enfrenta este pájaro y cómo se intenta evitar su desaparición.

Martín

Martín (en la foto de arriba, el que no es Tito) fue la primera persona que conocí el primer día de primero de Biología. Y ya, desde entonces...
Martín siempre me saca una MH de ventaja y se mueve mucho más que yo. A principios del pasado verano se dejó caer por Cabrera a trabajar en un experimento de polinización, y de los contactos de aquella época viene el que dentro de apenas 20 días se vaya a ir dos semanitas a Noruega, con sueldo y gastos pagados, a colaborar en otro experimento de polinización.
Martín es además un buen amigo, que se acuerda de los demás para las cosas importantes y no sólo para chorradas, y por eso somos dos los que entre el 14 de mayo y el 1 de junio estaremos en Aas (40 Km al sur de Oslo), en la UMB, ayudando a una investigadora almeriense formada en Mallorca en un experimento de polinización, con sueldo (buen sueldo) y gastos pagados.

Martín... Muchas gracias.

Época de cría (y II)

Más de aves reproductoras: Ya sabéis que me encantan los vencejos comunes Apus apus, por lo que implican de heraldos de la primavera y eso, pero el jueves pasado estuve a punto de cambiar de idea... Una pareja buscando un lugar donde hacer el nido, ha debido de encontrar no sé cómo entre las tejas de mi edificio un camino hasta el falso techo de mi cuarto (vivimos en el último piso, justo bajo el tejado), y a las seis de la mañana comenzaron a desperezarse. Las patas de los vencejos son tan pequeñas que, si se posan en el suelo, no son capaces de despegar de nuevo; pero eso no es óbice para que no puedan correr de un lado a otro, arañando la escayola, dándose golpes y chillando con alegría hasta que por fin deciden dejarse caer al vacío por la cornisa para ir a buscar el desayuno... Los habría matado, el jueves y cada uno de estos días, en los que siguen despertándome a horas intempestivas; ¡claro, como vienen a acostarse sobre las ocho de la tarde (que también los he oído, también)! Aunque ayer y hoy me he vengado; al tener clase a las 8:30, creo que ha sido mi despertador el que los ha despertado a ellos... ¡Que se fastidien!

Época de cría (I)

Desde el otoño pasado, Vero y yo teníamos controlada una pareja de ánades azulones Anas platyrrhynchos en el estanque del Jardín Botánico “Alfonso XIII” del Campus. Desaparecía alguno, volvía a aparecer, aparecieron un día dos parejas, desapareció una... hasta que hará cosa de un mes dejamos de verlos. Pero no se habían marchado; hace una semana pudimos ver a Rincha (Rincha es la mujer de Plato... Yo no les he puesto los nombres) vigilando orgullosa a sus ocho patitos. Esta última semana ha sido un sinvivir para Vero, siempre temerosa de que les ocurra algo. Además, se empeñan en dormir la siesta entre los arbustos, de forma que desaparecen durante horas, para desesperación de la pobre chica... La historia, contada algo más al detalle (y con otro estilo), aquí.

Historias de domingo

Nuestros desayunos de los fines de semana no tienen nada que envidiar a los de cualquier hotel. De paso que salgo para ir a Misa aprovecho para comprar el pan y un par de croissants en La Antigua Tahona de Magallanes; no sé cómo los harán, pero su sabor no puede compararse con ninguna de las industrialidades de las otras panaderías. Tostadas con mantequilla y mermelada, café, galletas, yogur, zumo natural... ¡Así cualquiera empieza el día con ganas!
Esta mañana prácticamente por error hemos acabado visitando (aunque escapamos enseguida) una exposición de la Sala Alcalá titulada La Cámara del Eco. Arte británico; era de un gafapastismo tan subido que no creo que ni en la finada Chocolataría se hubiesen atrevido a exponerla. Intentad leer el texto del enlace; si conseguís entender algo, se ruegan explicaciones...

Pero siempre hay tiempo de enderezar un domingo. Esta tarde, de paso que me acercaba a comprar los billetes de tren para ir al acto de licenciatura a Santiago, pude entrar en la Estación de Chamartín en la 3ª Feria Nacional de Coleccionistas de Playmobil. Había gran cantidad de maquetas de forofos de estos muñequitos, cada una llena de pequeños detalles la mar de simpáticos: En una recreación de El Planeta de los Simios, George Taylor y Nova se encuentran a orillas del mar con... el Oso y el Madroño (vaya, vaya, pero si aquí no hay playa... ¿cosas del cambio climático?); y en otra maqueta aparecen ¡un par de clicks percebeiros! De todo, vaya. En Madrid se encuentra uno de todo...

Darse un Capricho

Este fin de semana parecía presentarse bastante aburrido, pero mi hermano decidió esta mañana levantarse pronto e ir al Parque del Capricho. El Capricho, proyectado en el S. XVIII como jardín del palacio de los Duques de Osuna, es un parque no demasiado grande situado en el extremo este de Madrid. De diseño entre barroco y romántico, no me acabó de convencer mucho, aunque tal vez fuese por la gran cantidad de gente que había. En cualquier caso, el millón de lilos floridos que alegraban la vista y llenaban el aire con su fragancia bastaban para justificar la visita.

Además, en un momento dado me di cuenta de que los arrullos de torcaces que resonaban de árbol en árbol no se parecían a un arrullo de torcaz en absoluto; en vez de la típica canción de cinco tonos se ensimismaban volviendo una y otra vez sobre el mismo tema. Levanté la vista, y allí estaban mis primeras palomas zuritas Columba oenas. Para ser francos, allí estaban mis primeras mil palomas zuritas, ya que casi en cada árbol había una pareja de estas elegantes palomas haciéndose arrumacos o visitando agujeros en los que poder nidificar. Se me han resistido hasta hoy todos estos meses que llevo en Madrid, pero... ¡qué bonitas son, las condenadas...!

Ciencia... y paciencia

Esta mañana asistí en la Facultad a una charla de una recién doctorada sueca sobre su tesis, que trataba sobre la elección de hábitat de la collalba gris Oenanthe oenanthe; un ave que en España cría sólo en las montañas y allí ocupa el nicho de nuestras tarabillas. La charla me sirvió (como si me hiciese falta...) para comprobar mi bajo nivel de inglés; menos mal que el power point se explicaba por sí mismo. Muy interesante, en cualquier caso.

Por la tarde, la cruz de la moneda. En la Facultad de Farmacia se celebraba el I Congreso Nacional de Investigación para Alumnos de Pregrado en Ciencias de la Salud; y María, Jorge y Vero presentaban dos carteles relativos a la incidencia según sexos de un defecto genético... y realmente eran casi los únicos que se salvaban. Ladrillos increíbles que necesitarían de toda la tarde para leerse se daban la mano con textitos extraídos directamente de cualquier enciclopedia; mal maquetados, con faltas de ortografía... En fin, como le dije a mis amigos, aquello apestaba a crédito de libre configuración.

Elecciones a Rector

Dentro de una semana se celebran en la UCM las elecciones a Rector, y la verdad es que las cosas son bastante distintas a las de la USC. Como quiera que desde el principio ha habido cuatro candidatos (y no como a Senén, que sólo le salió un competidor de última hora), los susodichos se dedican en cuerpo y alma a hacer campaña (aquí podéis curiosear sus páginas web), sobre todo entre los alumnos: Blogs, charlas en todas las facultades, debates entre ellos... De todo, vaya. ¡Incluso conciertos! Realmente, una vez que se acostumbra uno a que el Reitor Magnífico ordene y mande sin más oposición que la que hace el CAF desde las vallas, sorprende ver cómo se mueven las cosas aquí. Aunque no por eso deja de dar un poco de vergüenza ajena el leer carteles como el de “Ángel Nogales, el Rector de los Chavales (sic), te trae a Pignosis en concierto” o el del acto de ayer de “Patxi Aldecoa. Kalimotxada Concierto” (parece increíble, pero ambos son absolutamente verídicos...)

Daimiel

Rayando el domingo, Javi, Vero y el que escribe ya estábamos camino del Parque Nacional de las Tablas de Daimiel (Ciudad Real). Llegando al desvío hacia el parque, en Puerto Lápice, mis primeros molinos quijotescos nos saludaban con sus cuatro brazos desde lo alto de una loma, prometiéndonos bajo el sol primaveral que, pese a los malos augurios de deterioro de la zona, íbamos a disfrutar de una jornada inolvidable.
Y no nos engañaron, no. En verdad las Tablas están muy tocadas, sin agua, debido a los absurdos regadíos que lo circundan y que se beben el agua del subsuelo, de forma que la poca agua que queda (un 1% y que además es de mentira, porque proviene del trasvase Tajo-Segura) es cada vez más salobre y está más contaminada. Pero la primavera aprieta, y entre las especies reproductoras y las que se encontraban en migración hacia el norte el parque bullía de bicherío decidido a no extinguirse así como así. Parecía difícil igualar las 14 de Elche, pero así ha sido. Además, todas bien vistas, de forma que no sería capaz de decir ahora cuál me ha gustado más... Aunque el macho de escribano palustre íberooriental Emberiza schoeniclus whiterby que se intuye en la foto tiene todas las papeletas, por pertenecer además a una subespecie propia de nuestro país y en vías de desaparición.
Después de comer nos acercamos a Alcázar de San Juan, donde hay tres de las muchas lagunas que forman lo que se conoce como “la Mancha húmeda”. Y aquello fue apoteósico... Parecía que estábamos en un zoo; había de todo y en cantidad. El cielo se encapotaba por momentos y una repentina tormenta acabó por enviarnos de vuelta a Madrid.

En fin, un día para recordar durante mucho tiempo. Más que Tablas, yo creo que ganamos...

Noticias breves

Sigo vivo, pero entre clases, prácticas y trabajos para presentar ando un poco pillado de tiempo... Y además, la apoteosis ornitológica de ayer en Daimiel merece una entrada en condiciones. Un poco de paciencia, queridos lectores...

Biólogos malotes

Como un malestar repentino ha obligado a Jorge a guardar cama desde ayer, esta tarde sólo hemos ido Vero y yo a la VIII Feria “Madrid es Ciencia”, en el IFEMA. Es una pena que hubiese tanta gente, pero aún así lo pasamos muy bien. Había decenas de expositores; la mayoría (cosa que me sorprendió gratamente) de diversos colegios e institutos de la comunidad, en los que los propios alumnos del centro explicaban al interesado el significado de las maquetas o experimentos allí montados. También de universidades, empresas, laboratorios...

Y, en el de la Consejería de Turismo de Castilla y León, una vitrina dedicada a Atapuerca desató nuestra ira biológica. En la misma se exponían tres réplicas de cráneos de homínidos fósiles; un Homo sapiens Cro Magnon, un Homo erectus y un Homo heidelbergensis. Todo correcto, si no fuese porque las etiquetas de la vitrina se referían a los dos primeros cráneos como Homo ergaster y Homo neanderthalensis. Estuvimos en un tris de hacérselo notar al responsable del expositor, pero eso habría sido demasiado fácil (y además me habría dado mucha vergüenza...). En una mesa en otra parte de la Feria cogimos un par de post-it y, tras escribir en ellos los nombres correctos de los fósiles, comenzamos a filmar con la cámara de Vero nuestra acción subversiva, digna de pasar a los anales de YouTube y de dar el salto a los informativos nacionales, como el montaje del escaño de Zapatero... Tras grabar nuestra declaración de intenciones y las aberraciones de la vitrina, me retiré con la cámara a un ángulo apartado y Vero, oculto su rostro con un pañuelo, aprovechó un descuido del guarda más cercano para pegar los papeles en la vitrina... ¡Qué subidón de adrenalina! ¡Esto es ser malote, y lo demás son tonterías! Lástima que, sin yo apercibirme, la tarjeta de memoria se llenase cuando apenas llevábamos unos segundos de acción. ¡Os habríais reído tanto viendo el vídeo...!

Escherfosfórico

Igual que al mirar una puesta de sol sobre el mar uno piensa en la portada del libro de Religión del colegio, al mirar un grabado de Escher a uno le viene a la cabeza el libro de Matemáticas. Llevaba tiempo queriendo visitar la exposición de grabados de "M. C.Escher. El arte de lo imposible" de la Fundación CYII, pero nunca encontraba cuándo ir. Y en esta su última semana, a falta de una ya he ido dos veces.

La exposición ha sido muy popular; colas de una hora para poder entrar y, ya dentro, más colas delante de los grabados. Pero, realmente, merece la pena. Entre los 135 grabados expuestos están muchas de sus obras más conocidas, pero también alguno de sus primeros trabajos, que incluyen paisajes de extraordinaria belleza de los pueblos del sur de Italia y otros muy simpáticos como los de la serie La Creación, del que me encantó el de abajo (El 6º día), con esa palmera que parece hecha de fuegos artificiales.

Y no salimos del Museo...

Por fin hoy el Avutardo nos ha pasado los datos que necesitamos para hacer el trabajo de la troncal; la verdad ya iba siendo hora... De paso, nos ha liado a María y a mí para que fuésemos por la tarde al MNCN a ver a su hermano para que nos proporcionase los datos del último censo que han hecho, que seguro que serían muy interesantes para nuestro trabajo... Vamos, que le hiciésemos de correo entre su hermano y él.

Así pues, por la tarde nos dirigimos al Museo, pensando en lo puteados que llegamos a estar los alumnos... Nos quedaba la esperanza de que su hermano nos hiciese subir a verle al despacho, ya que así podríamos colarnos y ver gratis el Museo, que María nunca había estado. Pero el caballeroso de D. Juan Carlos Alonso (de ahora en adelante, el Brothertardo) decidió salir a recibirnos en persona, con lo que nuestras esperanzas quedaron nuevamente frustradas. Todavía María, fiándose del poder persuasor de sus ojos color ala de arrendajo, le pidió al guarda que nos dejase pasar por la cara, pero ante su gesto de ¿me estás vacilando, niña? No nos quedó más que agachar las orejas y pagar religiosamente los 3 € de la entrada... El Museo es bonito de por sí, pero se disfruta mucho más enseñándoselo al neófito, así que pasamos una muy buena tarde. Yo aún tengo que volver el viernes, a ver al Lagartijo; por mí, ningún problema.

Reencuentros

A lo largo del día fui reencontrándome con todos mis compañeros. Quien más, quien menos, todos hemos escapado de Madrid durante estos días:
- Javi y su familia han recorrido de cabo a rabo el valle del Loira. Para darme envidia, me ha enviado un par de fotos de las cercetas carretonas Anas querquedula que ha visto. Además, de refilón, me menciona que no se acordaba, pero que ya las había visto hace tres años, así que que no le había hecho tanta ilusión...
- Mario se ha perdido (metafóricamente) con un amigo de acampada libre Noruega adelante, contando maravillas de todo lo que ha visto, a pesar de los precios.
- María ha estado con sus amigos en Galicia, encantada del sol y de lo bonito que es todo... Menos Santiago, que la decepcionó algo. Desde luego, lo que hay que oír...
- Y Vero y Jorge, para darnos ejemplo a todos, repiten campamento con disminuidos síquicos en Barcelona.

Y quien más quien menos presumía de fotos, de moreno, contaba anécdotas... Menos Gaetano, que cumple hoy 22 años y al que todavía no le hemos vuelto a ver el pelo (a pesar de lo largo que lo tiene); auguri!!

Viajando, viajando...

Siempre es entretenido experimentar desde dentro qué es eso del “Nivel amarillo: tráfico lento con paradas intermitentes a partir del PK 96 de la AP-6”, aunque eso suponga llegar a casa un par de horas más tarde de lo previsto...
Con tanto viaje, viene bastante al caso el hablar de una canción que descubrí hace algunos meses, a través de otras que con la misma música elaboran una letra bien distinta (creo que eso tiene un nombre, pero ahora mismo no lo recuerdo; ¿alguna ayuda?). La canción es la ochentera Voyage, voyage, de Desireless. La estética del videoclip, realmente, no tiene desperdicio.

Y ya de paso, podéis echarle un vistazo a sus versiones Bayas, bayas y Foiegras, foiegras; difícil escoger cuál es mejor, ¿no? Por cierto, ¿cómo se hace esa cosa tan chula de subir los vídeos de YouTube directamente a otra página web, en vez de enlazarlos de esta forma tan cutre?

Desahogo pascual

-“Christos aneste!”
-“Alethos aneste!”

"Non est hic : Surrexit enim, sicut dixit..."

"Dic nobis, Maria
quid vidisti in via ?
Sepulcrum Christi viventis
et gloriam vidi resurgentis
angelicos testes,
sudarium et vestes.
Surrexit Christus, spes mea ;
precedet vos in Galileam."

¡Hala, qué a gusto me he quedado, después de tanto nacerdelagua y tanto power point...!

¡FELICES PASCUAS A TODOS!

Dispensando...

Estos días, en que para entretener el tiempo entre horas o aprovechando los viajes en tren he repasado algunas obritas de Fole que tenía medio olvidadas, me he sonreído al ver cómo muchos personajes, al igual que hacen mis abuelos, piden dispensa a sus oyentes antes de contar algún asunto escabroso, sobre todo si coincide el relato con la hora de la sobremesa.
Ayer descubrí el terrible secreto que ocultaban las cruces que, cada tres o cuatro días (o hasta una semana), hace la chica que cuida a mis abuelos sobre el calendario. ¡Nunca creí que el dicho (dispensando) “ser algo más duro que la caca de viejo” se me revelase tan gráficamente atroz...!

Viernes Santo: Día de visita

Como habíamos planeado, una vez mis abuelos quedaron atendidos mi madre y yo salimos a visitar Monumentos. Los Monumentos (del latín monumentum,-i; sepulcro) son los sagrarios adornados con velas y flores donde se depositan, tras la Misa de Jueves Santo, las Hostias que haya en la iglesia, reservándolas para que los fieles puedan comulgar el Viernes Santo, cuando no hay Misa. Es tradición visitar los distintos Monumentos de una ciudad; ya que Cristo ha tenido el detalle de querer quedarse con nosotros, qué menos que ir a verle de vez en cuando... Pues comenzando por la parroquia de Santiago das Caldas (la nuestra) y acabando en Nª Sª de Fátima al final fueron 8, no está mal.
La sorpresa (al menos para mí, que mi madre ya lo sabía) vino por la tarde, cuando nos devolvieron la visita. El párroco se acercó hasta aquí para confesar a mis abuelos y llevarles la Comunión. “Señor, yo no soy digno de que entres en mi casa...”, pero si quieres venir, no seré yo quien se queje.

Jueves Santo: Ourense

Este día lo he pasado con mi madre, que se cela de que pase tanto tiempo con mis amigos y nunca esté con ella. Por la mañana nos hemos hartado de dar vueltas por el casco viejo de Orense; no es Santiago, pero últimamente da gusto también pasear por él, porque se han rehabilitado y vuelto a ocupar casas abandonadas, y se han abierto muchos comercios nuevos. No soy tan mayor (aunque a veces me lo crea), pero aún recuerdo cómo de niño en el casco viejo sólo había garitos de mala muerte, casas ruinosas mostrando su esqueleto de vigas carcomidas y pallabarro por los huecos de la fachada, y aquellos a los que el resto de la ciudad marginaba a donde no molestaban a las conciencias: drogadictos y mesalinas de caras tristes.
Por la tarde hemos comenzado el Triduo Pascual con la Misa In coena Domini, en la parroquia del barrio. Espero que mañana por la mañana podamos ir a visitar Monumentos...

Miércoles Santo: Santiago de Compostela

Si bien el lunes me quejaba de tener que moverme para visitar a la gente, no sucede lo mismo cuando “me toca” ir a Santiago; siempre es un placer pasear por las muchas veces centenarias calles compostelanas.
En el viaje de ida tuve además la sorpresa de encontrarme con Miguel Touriño; uno de los pocos compañeros de colegio con los que lamento no haber mantenido relación. Resulta que Miguel sale además con una de mis compañeras de Santiago, Sonia, que prometió leer y comentar este blog a diario y que a la vista está no cumple lo que promete. Una de Ribeira, el otro asiduo veraneante en la villa barbantina, ya llevan dos años juntos; que dure.
Después de ir a Misa a la Catedral bajé hasta la Facultad. Todavía no estaban las fotos de la orla, pero ya se podía ver la provisional, y me pasé un buen rato riéndome de las caras de unos y otros. Después fui a esperar a Raúl (el de Azores) al tren, y pasamos un estupendo día juntos por Santiago, visitando además a los amigos de La Estila.
Y ya llega de viajes, que a lo tonto a lo tonto mañana ya es Jueves Santo, y el domingo toca volver a la capi...

Martes Santo: Vilar de Barrio

Esta mañana he ido con mi madre a la aldea, a comprobar que todo seguía correctamente en la casa de mis abuelos. Volvimos por los terrenos de la antigua Laguna de Antela. Los canales de drenaje de la misma, que normalmente llevan poca agua y en verano a penas ninguna, contaban con un caudal considerable, y toda la superficie estaba alfombrada del verde y rojo de la multitud de plantas acuáticas que medraron aprovechando esta efímera bonanza. Y allí, sesteando semisumergida en esta colcha vegetal, había una nutria paleártica Lutra lutra. Tenía muchas ganas de verlas, y realmente son unos animales preciosos. Retrocedimos con el coche para que mi madre pudiese verla también, pero al volver a pasar el animal receló y desapareció suavemente en el agua...
Ya por la tarde he quedado con Javi (otro Javi; también de la etapa de Lugo, como el de ayer, pero éste nativo de Orense) para dar una vuelta, y va fraguando la idea de una posible visita a Madrid durante el 1 de mayo; a ver en qué queda el asunto.

Lunes Santo: A Coruña

Como cada vez que tengo vacaciones, comienzan las peregrinaciones por Galicia adelante. A veces me canso y me cabreo con el mundo... ¿Por qué narices tengo que ser yo el que siempre vaya a ver a la gente, porque nadie se acerca hasta Orense ni aunque le paguen? ¿Puedo realmente decir que son amigos míos todos esos que, si no me preocupara yo de escribirles, llamarles o ir a verlos, no tardarían en olvidarse de mí...?
Y luego me calmo y me doy cuenta de que exagero, que ni ellos son tan malos ni yo tan bueno. Y disfruto al 100 % de un maravilloso día soleado en Coruña con Javi, otro de los muchos Javis que conozco y uno de mis mejores amigos. Realmente, no faltó de nada; ni siquiera un bonito macho de cotorra de Kramer Psittacula krameri en los jardines de Méndez Núñez, o una preciosa alca común Alca torda ya en plumaje nupcial flotando sosegadamente en aguas del puerto. Ya por la tarde, junto con su madre y su hermano, emprendimos la misión imposible de encontrar un traje que le quedara bien, para su acto de licenciatura. Tanto nos entretuvimos que estuve en un tris de perder el tren de vuelta a Orense...
Y ahora que lo pienso, sumando la ida y la vuelta hoy llevo 5 h de tren, y además me he hartado de pasear Coruña arriba y abajo. Parece mentira, ¿cómo puede luego la gente decir que no tiene tiempo de hacer nada?

Fenología, cuándo serás mía...

Al hilo del mensaje de ayer, viene al caso hablar sobre esto. La Fenología es la ciencia que estudia las fechas en que ocurren los distintos fenómenos naturales susceptibles de variar de año en año, tales como la floración de las distintas especies de plantas o la llegada/partida de los animales migradores. Las primeras anotaciones sobre el tema corresponden a una familia de granjeros ingleses, que a lo largo de varias generaciones y desde el S. XVII fueron anotando los eventos de este tipo que se daban en sus tierras.
También desde hace más de 50 años el Instituto Nacional de Meteorología coordina una Red Fenológica Nacional, con colaboradores voluntarios de todo el país. Tú también puedes colaborar; descubre cómo en esta página web.